Escena dos: Costanera Arturo Prat

Me desdigo, que Dresden ni que nada. El sol que había en Loncoche se vino a la costa y Valdivia está espléndida. Camino por la costanera y siento que no se puede pedir más, en el río Calle Calle está remando una kayakista, y por el borde asfaltado una pareja de valdivianas bajitas trotan. Las ciudades en donde uno ve a gente corriente corriendo y haciendo deporte son lejos mis favoritas.
Un turista escandinavo, alto como un alerce, se aproxima hacia mí en sentido contrario. Le sonrío y me dice "Hola", con acento. Es un hola que lo sé, significa: que ciudad más linda es esta, tienes un país muy bonito, si sólo sonriéseis más.

A Rockstar me lo encuentro con unos amigos en frente de la chocolatería EntreLagos, pura suerte, resulta que le robaron el celular. Pero prefiere no hablar de eso. Estamos todos famélicos así que asaltamos el Café Palace y a punta de pailas de huevos, cafés cortados, barros jarpas y un kuchen de nuez nos damos por satisfechos.

Los amigos de R trajeron sus bicicletas, pero si quieren aprovecharlas hay que apresurarse. El tiempo se supone viene lluvioso el fin de semana, en cambio hoy, vaya, mi prima llega y la acompaño a hacer una fila en un banco. Mi prima vino al sur a hacer elservicio país y se quedó. Ahora trabaja asesorando a comunidades lafquenches dedicadas a la pesca artesanal, es un lujo de persona mi prima, que como todos en esta ciudad, me habla del clima."Llevamos dos semanas de sol, pero ayer llovió caleta, la dura que tenís suerte, primo".

Pero yo creo que en este caso no se trata de suerte, sino de voluntad. Hay que puro venir a Valdivia en la semana del festival. Tal vez aún estéis a tiempo. Aún si no se acreditan com oprensa, igual es muy barato. Las funciones en el CineClub y el teatro Lord Cochrane están a $1.000 (qué es eso?) , y las que se realizarán en las nuevas salas de cine de la ciudad, pertenecientes al Mall Plaza de los Ríos, cuestan $1500. Si esto no es una ganga...

Voy al hotel Melillanca a pedir mi credencial, el jefe de prensa me pregunta por mi blog, qué cuantas visitas tiene? Yo trato de ser diplomático. Tan tan popular no soy, no soy Voikot, no soy Copano, creo que las acciones de Huracán se cotizan mejor actualmente en el mercado. Pero estoy aquí, y la idea es que a través mío, ustedes también sientan que están aquí, y quien dice si en una de esas no se animan y vienen.

Ernesto Garratt, que hoy escribió el artículo de portada de la Wikén, ya está entrevistando quizás a quien en la sala de prensa, no para Ernesto. Yo todavía no he visto a ningún famoso, todavía no se programa ninguna película. A lo más fui a conocer el nuevo mall, que es bastante similar a todos los otros malls de este planeta.

No, si hoy es el buen tiempo el que monopoliza el interés, mientras no llegue Benjamín Vicuña las cámaras todavía enfocan a las gaviotas Cahuil del río, y de paso sacan fotos igual de bonitas.

Primera escena: Terminal de buses

El sol estaba espléndido hasta Loncoche, aquí no llueve pero es un día así no más, la lata es que supuestamente me iba a venir con Rockstar, pero compramos boletos en buses distintos y ahora estoy aquí solo, su celular no contesta.

Mi prima tiene pega hasta las tres, así que tengo que aniquilar el tiempo. Habría sido genial venir con Rockstar, pero que se le va hacer. Y qué demonios hace con su celular apagado????, será que se quedó en Santiago?, no tengo idea de nada.

Valdivia está bonita como siempre, pero me hace pensar en Dresden, que es más bonita aún. Injusta comparación, mejor atenerse a lo que Chile nos ofrece.

Las bandurrias en el camino, los nudos de carreteras con sus jardines, los árboles nativos imposibles de acomodar en la campiña inglesa.

Vi dos cisnes de cuello de negro saliendo de San José de la Mariquina, pero ahora lo que quiero es ver a mi amigo.

Y desayunar algo más contundente que el alfajor con café Dolca que me dieron en el bus.

Tren al sur

Ya pasé los tests psicológicos, me quedó una buena impresión de la entrevista, ahora sí que Alea jacta est, y lo mejor que puedo hacer es mandarme a cambiar.

A cambiar de aires, a por cruditos y Kunstmann, a Valdivia.

Al Festival de Cine de Valdivia.

Está será mi cuarta vez. La primera fui con varias compañeras de periodismo a reportear para el ramo de Taller, me saqué un 6.5, entrevisté a un director de cine en los urinales del hotel, conocí a un protopsicópata adolescente en el Parque Saval, carreteamos pesado, una amiga bailó con Nicolás López, no me acuerdo cual fue, yo no me acuerdo ni con quien bailé, pero si de que me agarré con una amiga. Fue el año de "Y tu mamá también" y de "In the mood for love". Pude ver también "Diálogo de exiliados" de Raúl Ruiz, muy buena.

La segunda vez gasté diez lucas por un paraguas en Taboada, echamos la talla con Blanca Lewein, me intoxiqué con una paila marina. Esa vez fui con otra amiga, con quien me llevaba tan bien que no vimos problema en compartir cama. Pero Valdivia es turbulenta, ella conoció al que sería su pololo por dos años, y a mi me pateó de manera sádica y cinematográfica. Es fuerte que te pateen como amigo. Más aún después de habernos reido juntos viendo el estreno de "About a boy" y "Kissing Jessica Stein". "Un cangrejo en la cabeza" e "italiano para principantes", las tuve que ver solo. Alcanzamos a ver juntos sí "El crimen del padre Amaro", tal vez el mayor crimen fue ese.

La tercera vez fui solo, que ya me parecía Valdivia tener yetta. Y fue mucho mejor así, hice amigos impensados en todos lados, me escapé a Corral, Niebla y Mancera. Estuve para la inolvidable presentación de "Sexo con amor" (esto fue el 2003), compartí taxi con Ventura Pons, conocí a Manuela Martelli y vi una película de Francisco Lombardi muy buena ("Ojos que no ven") que nunca consiguió distribución nacional.

Y este año, este año.

Viajo solo, que la yetta está en viajar con alguien. Y me quedo donde mi prima, con quien nunca he peleado y si nos viene el "efecto Valdivia", igual seguiremos siendo primos, eso no cambia.

Pero lo importante son las películas, y las que me interesan son éstas. A ver si también se animan y se escapan a Valdivia este findesemana, EFE hace descuentos en los pasajes de tren, no, en serio, Valdivia es la ciudad más cool de Chile, aunque diluvie, esta semana.

El énfasis está puesto en el cine chileno, con los estrenos de "En la cama", "Se arrienda", "la sagrada familia" y "Juegos de verano". "Play"(candidata chilena al Oscar) y "Mi mejor enemigo" (candidata al Goya) también serán exhibidas.

Luego nunca puede faltar el cine español. Quiero ver "Cachorro" (una película sobre osos madrileños que le debería gustar mucho a Eleutherio), y también "La vida que te espera", "Inconscientes" y "Habana Blues".

Argentina se pone con "Como un avión estrellado", del director de "Nadar solo", Exequiel Acuña. Tmabién Pablo Trapero trae "Familia rodante" y Tristán Bauer "Iluminados por el fuego", que viene de ganar en San Sebastián. Que trajeran "Un año sin amor" habría sido bueno.

Hay una retrospectiva de Arturo Ripstein y de cine mexicano en general, pero nada muy nuevo por ahí, lástima que no hayan programado la tal vez too artsy (y too gay) "Mil nubes de paz cercan el cielo, amor jamás dejarás de ser amor", que uno sabe por el puro título que jamás podremos verla en cines o en tu tienda Blockbuster más cercana. Trataré de ver "El mago", en honor a mi amigo Manuel, u otra que se llama "Cuento de hadas para dormir cocodrilos", aunque estas las presentan el último día y no sé si me quede hasta el final.

Y claro, están también la exhibición de cortometrajes, animaciones y documentales, de los documentables el imperdible es "80's" de Eduardo Bertrán.

Pero siempre en estos festivales hay sorpresas, bienvenidas sean. Hay unas cuantas películas chinas, rusas y francesas que no me suenan para nada. Y yo algo (no mucho) igual se de pelis chinas, rusas y francesas.

Cine estadounidense? Mejor ni preguntar, la ausencia es demasiado notoria, se arriesga uno a que le arrojen una paila marina por la cabeza.

Igual es un esfuerzo loable de fortalecer el cine independiente frente a Hollywood, Discriminación positiva. O como grafica aquí Colin Farrell, un intento de cambiar la actitud tradicional de los medios hace el cine basura, al que nunca le faltan salas de exhibición, a desmedro de los cineastas locales.


La verdad no tengo la menor idea a qué se está refiriendo el irlandés este.

Ya veremos que tal Valdivia, será interesante. Una bonita ciudad tomada por asalto por publicistas que querrán monopolizar la tampoco tan masiva cobertura de la prensa. Invariablemente en Valdivia la portadas de los diarios cada vez que he ido no se desvían de su habitual menú de violaciones y asesinatos.

Habrá que ver que tal resulta. Algunos de los sitios web que linkee están bien buenos, hay gente que sabe hacer las cosas, sabe vender, hay que ver ahora si lo que venden es bueno.
La banda sonora de "Se arrienda" me parece que está buena.

Pero igual yo aquí lo que escucho es "Oh, sailor", de Fiona Apple.

El bien no hace ruido

Vengo de dar el primero de los tests psicológicos y tengo la cabeza hecha un lío. Es que igual agota responder doscientas preguntas de alternativas capciosas aparentemente desprovistas de sentido, (pero que sabemos están ahí por algo).

He estado intentando escribir un post sobre ayer, que fui con M y R a la Quinta Normal y a la exposición de Fluxus, pero ya casi estoy a punto de tirar la toalla.

Así que me digo, si no puedo escribir un post derivativo y banal como siempre, al menos podría escribir unas capsulitas. Cosas que vi y que me llamaron la atención.

Este no es tanto un post como la punta de la alfombra que la empleada de aseo levanta para barrer el polvo debajo.

...


Un teenager borracho que a pleno día en Providencia hurga entre la basura hasta que encuentra una botella de pisco Capel, la eleva al cielo, que consagra su líquido brillante y luego de tomar un trago la vuelve a ocultar donde estaba. Es primer día de primavera que salgo con chalas y me toca contemplar un sacramento dionisíaco. No hay feligreses, sólo palomas.

A una paloma le cuelga un huevo. Igual que a Cristián García-Huidobro en el Desjueves. la paloma intenta sacárselo pero el huevo lo tiene pegado a la cloaca. Mala idea, cagarse sobre un huevo. Son sucias las palomas. Mi cacatúa no hace eso. Ella se caga sobre la nueva constitución.

En la Quinta Normal se arriendan una bicicletas artesanales con look de formula 1, se llaman bici-harleys. 500 pesos los 15 minutos, y puedes dar vueltas por toda la quinta, y no hay guardias como en Sans-Souci, que te salgan persiguiendo por exceso de velocidad.

Hay una exposición de Fluxus en el Museo de Arte Contemporáneo, pero el verdadero espíritu Fluxus (que tiene un poco que ver con lo lúdico, y lo cotidiano, y es medio dadaísta/surrealista y tampoco vale la pena analizarlo demasiado) se encuentra en el muy decadente Museo de Historia Natural.
Ahí pueden ustedes encontrar en la vitrina que explica los males de la contaminación, un envoltorio de super 8 y una botella de Bilz con un conchito de Bilz (circa 1992) adentro. Basura reciclada Fluxus. Y al lado un conjunto de postales, en una de ellas se lee "menos mal que me fui de ese pequeñísimo país donde no se puede hacer nada(Chile)". Y un telefono de disco con sólo 8 números y uno trata de encontrarle sentido a estos objetos que y no es fácil. Corona la exhibición una frase referida a la contaminación acústica cuya sabiduría me supera.

"El bien no hace ruido"

En la Quinta Normal había mucho ruido, pero no parecía del tipo malvado. Y yo he estado escuchando música minimalista: Brian Eno y Arvo Pärt (estonio, hizo el tema principal de la película "Gerry" de Gus van Sant). Me pregunto qué dirá eso de mí como persona. Maldito test psicológico, me dejó hecho un amasijo de Dawson Leary y Ally McBeal. Necesito un polvo, necesito un porro, necesito una ducha fría, no tengo nada que hacer, tengo demasiadas cosas que hacer, here I go volviéndome bipolar. AAAAAaahhhhhhhhhhhh!!!

"El bien no hace ruido"

Respirar, expirar. Tal vez debería hacer caso a esa frase (hacer caos a esa frase, fue el resultado de mi primera tipeada, go figure, Freud), y hacer voto de silencio por mientras me adapto a la primavera, a la presencia de polen y cannabis en el aire. A las alternativas capciosas y a los dioses callejeros.

Vivienda y decoración

- "A mi me da lo mismo, pero qué va a decir tu padre cuando lo vea, no le va a gustar, te advierto, yo que tú la sacaba."
- "Qué se va a dar cuenta, si mi viejo no se fija en los detalles, alguna vez se ha dado cuenta cuando tú te has pasado todo el día cambiando los muebles de lugar?"
- "Bueno, la verdad que no, pero no me cambies de tema que esto es distinto".

Tanto escándalo por una simple postal alemana de dos hombres dandose un beso.

Cuando regresé del viejo continente me encontré con que me habían cambiado de habitación. Pasé de tener paredes azul añil a paredes verde agua. El gran mapa de Europa me lo respetaron, pero sería todo. Algo tenía que hacer entonces para recobrar una leve sensación de dominio y pertenencia sobre el espacio en que duermo. Lo que hice fue llenar las paredes de postales.

Una de la casa museo de Hundertwasser en Viena , otra del castillo de Praga, otra de Notre Dame de Paris, un árbol muy intrincado pintado por Egon Schiele y una fotografía aérea de Yann-Arthus Bertrand a un caballo celta dibujado en las laderas de una colina en Oxfordshire.

Traté de comprar una postal en cada museo al que fui. Traté, digo, porque fueron demasiados. Pero ahí están, en mis paredes, el grabado de la Melancolía de Durero (regalo de la Poli en El Prado), una Madonna de Filippo Lippi (comprada en el Palazzo Pitti, Florencia), un retrato de Damon Albarn por Julian Opie (comprado en la National Portrait Gallery).

Hasta ahí todo bien, claro. Es acercándose a la pared que está justo al lado de mi cama donde el arte se vuelve un poco más provocador.

- "Es que ahora tu sabes, viene la abuelita para el asado de este domingo y yo creo que si ve eso le da un ataque"
- "la la la la la la la la"
- "Escúchame!, mira que he hablado con tu hermana y ella opina lo mismo, tienes que sacar esa postal de ahí"

Me hago el leso, le pregunto, ¿cuál quieres que saque? saco acaso a los dos niñitos de Toulouse Lautrec que duermen juntos? arte degenerado, no? la compré en el Musée d'Orsay, junto con esta otra, "Orfeo" de Gustave Moreau...
-"Sabes exactamente a cual postal me refiero"

- "Pero vamos!, si esto es el colmo madre, se trata de mi habitación, se trata de un simple beso. Mi hermano que duerme aquí al lado entiende eso perfectamente bien y tiene 13. Además tú fíjate que es arte, y que está en un contexto particular. Fíjate la cara de ese retrato de Lucien Freud (Museo Correr, Venezia), esa niña mira como con asco a los besadores estos, si es una instalación! Y luego tienes aquí junto a TinTin y el Capitán Haddock(Musée de la Bande-Dessinée, Bruselas), ellos miran a otro lado, son distractivos, te hacen desviar la atención, como que no has visto nada. Es que no entiendes, si el contexto lo hace todo! Sigue las líneas de interés, que al final apuntan a este cuadro de Alma-Tadema (Fitzwilliam Museum, Cambridge). Un muchachito victoriano leyendo una novela de aventuras, trasladado sin percatarse a Africa. Sus imaginación se ha hecho realidad. Esa es la postal que más me interpreta. Pero al final funcionan todas en conjunto, y me rehuso a comprometer mi visión artística. Lo siento pero esa postal que tanto te preocupa se queda ahí"

- "Además vamos!, tienes que admitir que es una buena foto, es lejos el elemento más masculino de la habitación. Junto con el poster de Corto Maltese (Palazzo Squarcialupi, Siena)".
- "Tu dices el poster de ese tipo con arito que está detrás de la pluma de pavo real?"
- "Mmssí"

Soy injusto con mi madre, ella no es censuradora. Si al final parece que nadie lo es, que todos tratamos de proteger a otros. A nuestras abuelitas, a nuestros primos chicos. Pero yo opino que un beso no es más que un beso y que quien se escandaliza por eso tiene muy sucio el seso.

Antes, en mi antigua habitación, hace mucho tiempo, tenía yo un poster de Claudia Schiffer clavado con chinches a mi diario mural. No faltaba el tío intruso que me hacía chistes con ella, que se habrá imaginado para sus adentros que yo me hacía la paja pensando en sus tetas alemanas o algo así.

Yo a Claudia la tenía como mi cómplice, en esa foto aparecía con una sonrisa más enigmática que la de la Mona Lisa, una sonrisa que me decía "yo comparto tu secreto, y no lo sabrá más nadie".

Pero resulta que ya no es un secreto. Aunque mi abuelita no lo sepa porque todos opinan que para qué quitarle la ilusión de tener bisnietos pronto. Yo no sé, a veces me imagino que mi nonna igual si lo intuye, yo no más la abrazo fuerte, la abrazo como sé que nadie la abraza ya, y ella se ríe y se guarda para sí esas preguntas que tal vez traigan consigo respuestas con las que no esté de acuerdo. Nonna, sabía usted que tiene la sonrisa igual que la Claudia Schiffer?

Es solamente un beso, pero no es sólo eso. Es una foto de Wolfgang Tillmans que compré en Berlín, en el Hamburger Banhof, dos jóvenes que parecen estar celebrando algo, es un beso apasionado pero sin almíbar, no serviría para ilustrar una novela de Corín Tellado. Hay demasiado sudor, energía, orejas rojas, hay mucha testosterona. Creo que es un beso inconfundiblemente masculino. Cada día veo esa postal y siento que me aporta algo, me da una sensación de qué se yo, una sensación de victoria, de euforia. Lo mismo que la postal que está abajo, de un hombre que explota, como si fuera combustión espontánea, pero en líquido. El hombre se convierte en agua, la tensión desaparece y no queda más que el líquido vital, una fotografía que te choca al principio, pero después te refresca.


P.D.: Sigo en carrera para lo de la Academia, ahora se vienen los exámenes psicológicos. Pero ya la otra vez los pasé, no les tengo miedo.

De qué te ríes

Crecí viendo televisión, como el resto de mis compañeros de curso y amigos de la cuadra. Cuando chico, en El Salvador, no habían niños en la calle a las once de la mañana, todos estabamos adentro de nuestras casas viendo televisión.
Autos que se convertían en robots, o viceversa. Comandos especiales batallando en junglas por la posesión de un nuevo combustible que pondría fin a la Guerra Fría. Razas de mutantes multicolores en planetas perdidos. Diminutas criaturas azules adictas a la zarzaparrilla. Exploradores de las profundidades del planeta, donde según la leyenda existiría un "sol bajo el mar". Apocalipsis varios. Miles de productos con pilas y accesorios por separado. Terminada la dosis diaria los niños salíamos a revivir con nuestros juguetes las escenas que nos había inyectado la televisión.

La TV, más importante que cualquier profesor. Y esos eran tiempos bárbaros antes del cable. Mis padres se enfurecían conmigo porque prefería quedarme viendo televisión en vez de ir a la playa, a Bahía Inglesa. Yo comparaba, por un lado Magnetoscopio musical con videoclips nuevos cada semana ("Thriller"!!, "Like a prayer"!!), por el otro caminar de la mano de los padres por una playa hermosa, pero con una imagen continua y monótona. Una imagen que tal vez se parecía a algo que ellos a su vez vieron cuando chicos en la televisión.
Creo que los niños de entonces, no muy distintos de los de ahora, teníamos perfecta conciencia de formar parte de un culto, de una secta catódica potencialmente peligrosa.

El cable y la capital no hicieron más que acentuar todo esto, Santiago tiene muchos peligros, hijo mío, por qué mejor no te quedas viendo televisión?

A mediados de los noventa los guionistas gringos estaban empeñados en sacar del closet a toda una generación de homosexualitos incipientes. Acostumbrados a esperar del cable todo aquello que faltaba en la televisón local y en nuestras vidas locales. Beverly Hills 90210, El Mundo de Ángela, Ellen, Matrimonio con Hijos, Los Simpsons, la televisión ya no era tan paternalista, y me consideraba afortunado de estar ahí para darme cuenta. Seguí cada uno de los pasos, me bastaron un par de capítulos de la segunda temporada de Dawson's Creek para adivinar que Jack era gay al igual que yo y la misma semana que él se lo confesó a Joey, yo le conté lo mío a mi mejor amigo del colegio.

Me inculcaron esa misión, (la del "gay power") que yo honestamente pensaba era una misión ardua y novedosa. Ahora miro a mi alrededor post Will & Grace, y no me parece que haya sido necesario tanto alboroto. Lo que hay ahora es un escenario de hechos consumados y leyes políticamente correctas. La tensión se disipó y la homofobia casi me produce ternura.

Pienso que de haber visto más "Lazos familiares", me habría identificado con Michael J. Fox y habría estudiado Ingenería comercial y ahora tendría mi propio negocio.
Nunca me gustó mucho E.R., sabía que era una buena serie, pero me ponía tenso el flujo imparable de desgracias. Es posible que Scrubs en cambio si me hubiera motivado a estudiar Medicina, lo mismo que Ally Mc Beal me hizo desear estudiar Derecho (aunque ya era tarde) mucho más que Se hará Justicia. Nunca vi Miami Vice.

Y entré a periodismo por Felicity, por seguir a una amiga. Cuando debí en cambio haberlo hecho por Murphy Brown, o por último Newsradio. Y rechacé ofertas laborales porque el casting de los colegas no me parecía apropiado. Si disfruté tanto como botones en el Ritz, fue precisamente porque cada día era como estar en la Isla de la Fantasía, o el Crucero del Amor. Sueño con vivir rodeado de amigos que entran a mi departamento sin preguntar y arman conversaciones de la nada, y se beben todas las cervezas del refrigerador. Cuando mis amigos de verdad empiezan a hablar de temas prácticos me invade la sensación de que si nadie hace un chiste rápido, vamos a peder sintonía y van a cancelar nuestra serie.

Tengo zarpullido de televisión en los sesos. Por las mañanas me miro al espejo y trato de imaginar en que sitcom estoy. Ultimamente el espejo insiste que soy Kramer, de Seinfeld. Ultimamente trato de no mirarme al espejo.

Trato en cambio de buscar nuevas series, reprogramación neurolingüística. Una nueva adicción televisiva más sofisticada que no me exija vivir una vida de comentarios ingeniosos y risas grabadas cada 40 segundos. Me doy cuenta del efecto que tienen, el mal que hacen las imitaciones de la realidad. Nos venden un patrón contra el cual juzgaremos nuestras vidas. Las series no son inocentes, no deberíamos verlas sin receta médica. Dime qué ves, dime qué te hace reir y te diré en qué clase de ser humano te has convertido. En el futuro deberíamos elegir presidente en base a su dieta televisiva, que marca mucho más que el colegio en que estudiaron y el libro que sus asesores les dijeron que dijeran que estaban leyendo.

La gente que no ve televisón me impresiona, me parecen más freaks que los abstemios y los vegetarianos juntos. Luciano y Tiago, me cuesta imaginar lo que sería vivir como ellos, hasta que pienso que los personajes de la televisión no suelen ver mucha televisión. Tiago y Luciano entonces me parecen los protagonistas de un show nuevo, una Casita en la Pradera gay, y entonces sí que sus vidas me hacen sentido.

Me pregunto a veces si la gente me simpatiza por su potencial como personaje de una serie de televisión, en vista a sus posibilidades dramáticas o cómicas. Y las visitas a mis amigos las programo una vez por semana, para darles tiempo de ensayar sus líneas. Tengo amistades de media hora, amistades de hora, amistades de maratón dominical, todo según lo estimulante que nuestra interacción resulta, y creo que bien podría asignarles una tanda comercial con precios diferenciados.

Creo y le tengo temor a la consabida regla que indica que con el tiempo el interés del público decae y la calidad de las series desciende. Si pasó con Party Of Five, si está pasando con Queer as Folk, si pasó hace diez años con Los Venegas.

Temo todo el tiempo que ya hayan cancelado mi serie y yo no me haya dado cuenta.

Pero luego recuerdo, yo veo demasiada televisión, así que no califico para personaje. Por lo tanto mi vida no es una serie, y no estoy a merced de los auspiciadores inquietados por una baja en la teleaudiencia.

Soy un espectador, soy libre! digo. Y luego caigo en cuenta que eso no me ofrece ningún consuelo. La televisión me ha dado los modelos sobre los que bordar mi idea de felicidad, ahora mismo, creo que sería feliz compartiendo el departamento con una lesbiana embarazada en un edificio antiguo con conserje, club de video y vecinos intrusos y bocones de moralidad dudosa que nunca se sabe bien con quien están emparejados.

"Necesito un guionista para mi vida", le dijo una vez Calvin a Hobbes.

Necesito un personaje nuevo.

La fiesta nacional

Corresponde escribir un post dieciochero, pero yo estaba más inspirado el año pasado.

Y como ya cumplí tomando chicha, comiendo empanadas, parrillada y anticuchos, bajando de internet canciones de Violeta Parra y leyendo el especial de identidad nacional de la revista El Sábado. Pues siento que ya estoy listo.

Listo para leer "Dientes blancos" de Zadie Smith, ver en Antena 3 y Chilevisión capítulos repetidos de "Aquí no hay quien viva" y por la noche disfrutar la segunda película de Lisa Cholodenko, "Laurel Canyon" en Cinemax.

Me cuesta ser patriota, y en especial en estas fechas. Me gusta la chicha, me gusta la comida, me gusta ver las banderas incluso, pero aún así no me conecto. Claro, tal vez no pongo suficiente de mi parte.

En Paris, para el 14 de julio, bueno ya se sabe que Paris es una fiesta. Ese día se habían programado celebraciones vecinales en cada arrondisement, yo estaba en el Barrio Latino y muy cerca de mi hostal en la rue Mouffetard habían adornado una placita con banderas, un escenario en donde abuelitos bailaban y cantaban canciones de Edith Piaf, mientras varios residentes habían montado puestos improvisados donde vendían ponche, cerveza y manzanas confitadas.
Estaba lleno de turistas, como es de suponer, y el ánimo general era de gozo. Afuera de los monumentos famosos (el Panthéon, la Madeleine) habían tanques con militares simpáticos posando para las fotos como si acabaran de llegar de Normandía. Gozo. No tuve que gastar ningún euro para participar de él.

Algo así me gustaría acá, y capaz lo hay y no me enterado. Celebraciones de barrio, en Yungay y Brasil y Huemul. Sin requisito de licencia comercial mientras duren las festividades. Música en las calles y decoraciones en las calles, gente en las calles, sentados en la cuneta.

Bueno, por algo es que gran parte de los Santiaguinos se van a regiones para estas fechas. No es sólo para visitar a la familia, es también por recuperar el sentido de pertenencia a un barrio, por sentir de nuevo la calle como propia.

Yo no siento mi calle como propia. Entre los vecinos del barrio hay buenas maneras, pero el fondo es vacío. Y hay fiesta cerca, en el Parque Intercomunal (o Padre Hurtado). Pero voy allá y me siento en una celebración ajena, los aperos huasos no me dicen nada, y todos parecen querer venderme algo. Me gustaría conocer a quienes atienden, pero no hay nadie conocido. Me siento como turista recorriendo un folclor sin el encanto de lo exótico.

Es que también esto es Las Condes, cuando trabajé vendiendo cable puerta a puerta me emocionó lo acogedores que eran los chilenos en Puente Alto y en San Bernardo, en Maipú y La Legua. Yo era uno de esos molestosos e insistentes vendedores, y alguna vez hasta me invitaron a comer, me ofrecían un vasito de bebida helada para pasar la calore.

Creo que no estoy diciendo nada que no sea archisabido ya.

Mis padres se conocieron siendo vecinos en Quinta Normal, jugaban pichangas, jugaban al luche, perseguían volantines, andaban en bicicleta. Tomaban once siempre en una casa distinta.
Ahora hablan con nostalgia de eso, pero lo cierto es que ellos decidieron irse, y se fueron yendo todos, a trepar la cordillera. El que se quedaba en el barrio era un perdedor, no lo dicen, pero seguro lo sienten. Y no sé cuando les nació esa frustración que apesta un poco a arribismo, si tuvieron una infancia tan feliz y compartida, rodeados de amigos.

Amigos de la escasez, no tiene mucho sentido jugar solo con una pelota. Si lo tiene en cambio jugar solo al Rise of Nations o al Sims 2.

Es la época del año en que esos padres se dan cuenta de que cuando eran pobres en el fondo eran ricos y que ahora que son ricos también son pobres, y sacan a sus hijos a la calle y les pasan un trompo para que jueguen. Y sus hijos los miran incrédulos.

Mi hermano por hacer algo patriota ha tomado su primer sorbo de chicha, dice que le gustó mucho, pero no pidió más. Mi hermano es un mateo en todo caso, y este findesemana se ha dedicado a leer la Historia de Chile y preguntarme por los militares napoleónicos que vinieron a echarnos una mano en la guerra de independencia. Tal vez debería llevarlo al cine a ver Allende, antes que anuncie su voluntad de entrar al Ejército.

Después de todo un día de preparar el asado, recibir a la familia, zampárnoslo todo y después ordenar, mi hermana nos convence de partir en el auto a ver la fuente que inauguraron en Providencia cerca de la Estación Salvador.

- "Es lo más lindo que he visto", dice ella, que no sabe nada de la Fuente Mágica del Montjuic.

Y si, es bonito. Odio el monumento a la Aviación, y la estatua monumento a Rodó siempre me ha parecido horrenda (y quien es Rodó?, alguien sabe?), pero es bonito. Y hay varios chilenos sacando fotos, una novia se baja de su auto entre bocinazos y posa frente a los juegos de luces multicolores y los chorros de agua. Una nueva tradición nace ante nuestros ojos.

Algo más que hacer? Pienso en llamar a los amigos, pero este es día familiar, pienso que no me apetece demasiado gastar mi dinero en borracheras y malestar estomacal. Siento que ya cumplí y que estoy listo.

Listo para dar vuelta otra pagina de "Dientes blancos" de Zadie Smith, ver en Antena 3 o Chilevisión otro capítulo de la estupenda comedia española "Aquí no hay quien viva" y caer encantado por "Laurel Canyon" en Cinemax, viendo a Kate Beckinsale tirar con su suegra y el novio rockero de la suegra en una piscina de North Hollywood.

Que se mueran los notarios

Alguien me puede explicar de qué sirven los notarios? No pensaba votar por Aucán Huilcamán, pero me indigna enterarme hoy que su candidatura fue rechazada porque le faltó la firma del notario. Pobre Aucán, se vino en caballo a Santiago, en el camino se enteró que se murió su padre, pero siguió cabalgando, entregó las firmas, salió en la tele y ahora le dicen que le faltó una coima notarial así que su candidatura no es válida.
El casi-candidato presidencial mapuche alega que no le dieron tiempo y que para colmo los notarios le cobraban mínimo 2 mil pesos por cada firma que el quisiera legalizar. Si consideramos que se requieren 35.000 firmas para acreditarse como candidato a la presidencia de la República de Chile, estamos hablando de 70.000.000 de pesos mínimo para poder postularse (un requisito que no consta en la constitución).
Pero el asunto es, qué acredita la firma de un notario? Acaso el notario revisa a conciencia lo que firma? Yo nunca he visto a un notario. Siempre lo tienen escondido en una oficina donde me lo imagino corriendose la paja y firmando con el meñique del pie izquierdo. Y claro, ganando una cantidad de plata que los hacen la envidia de todos los abogados del país.

Opino que los notarios son unos matones mafiosos, pero institucionalizados que es lo peor.

La pregunta es, cumplen los notarios una función que una fotocopia adjunta del carnet de identidad no cumpla? Me encantaría que algún abogado asumiera la defensa de esos parásitos y me lo explicase. Y si ya no sirven para nada, más que para usufructuar de nosotros, como podemos eliminarlos?

Cartas explosivas? no es mala idea. Pero seguro las únicas víctimas serían las secretarias, que apuesto son las que de verdad firman los documentos que les llevan.

Una idea de antología

Antología ChileBlog 2005: Selección de los mejores textos de la blogósfera nacional

Qué Pablo Simonetti, Carla Guelfenbein o Roberto Bolaño. Lo que más he disfrutado en lectura este año está perdido en los archivos de varios blogs, algunos cierran, se pierden, se borran y no parece justo.

Me da rabia que se me ocurran estas ideas sabiendo que soy incapaz de llevarlas a cabo (de puro flojo no más).

Pero habrá algún empeñoso por ahí.

Alea Jacta Est

(suenan: "Días de tormenta" de Christina Rosenvinge, y "Want", de Rufus Wainwright)

La suerte esta echada, está echada a dormir en un callejón y no sé si hago mejor dejándola dormir la mona o si ya vale la pena probar a despertarla con un chorro de agua fría.

Di el examen de la Academia, Examen de Alternativas sobre Cultura General y Conocimientos Específicos. Estaba difícil, pero igual fui el primero en terminarlo. No tenía sentido demorarse más, uno sabe lo que sabe y el resto es jugar al loto. Así de simple.

Pregunta 98: A cuanto ascendió la inversión extranjera en Chile el año pasado? a)U$12mil millones, b)U$4mil millones, c) U$25mil millones, d)U$6mil millones o e)U$10mil millones

A ver, la respuesta correcta no es nunca ni la mayor ni la menor, está al medio, tirando pa' bajo ¿o pa' arriba? Quien puede saber la respuesta a esto? En qué texto estaba? Filo, marqué la e)

(era la d))

Pero yo tranquilo ahí pensando que si la tenía mala, los demás también. Y agradeciendo las preguntas sobre pintura chilena que supe responder gracias a que cuando chico me compraban el Icarito.

La secretaria me vio que ya estaba afuera y me saludó con un "bien, muchacho!".

Y como un muchacho bien yo me sentí todo el rato. Tengo la edad apropiada, que no puede ser más de 30 ni menos de 25. Tengo la facha apropiada, de chileno empeñoso que toca la guitarra y construye mediaguas, pero pelito corto y barba afeitada, zapatos lustrados, en fin.. "Sólo buscamos, la oportunidaaaad". Entre los postulantes cundían los rumores sobre los criterios de selección, un rubio quebrado decía "les apuesto que al final lo que importa es la percha, que revisan los antecedentes y las notas y al final votan por nosotros los más pintosos"

O-keeeey!, pero igual no se me escapaba que me estaba incluyendo en ese grupo.

La suerte está echada, está echada a perder. Qué es la suerte? Tiene agenda la suerte? Me cuesta convencerlos de que este concurso público no está viciado por los pitutos. Un sobrino abogado de la Faride Zerán (directora de la escuela de periodismo de la U de Chile) me dice que su tía le dijo que así era, y vamos, quien soy yo para contradecir a su tía?

Y en eso llegan los alumnos de la Academia, los elegidos que ingresaron la vez que yo postulé hace dos años. Me saludan, me dicen que seguro me va a ir bien, que me fue bien la vez pasada. Me hacen sentir demasiado favorito. Y siento que los demás me miran como si los ojos se me hubieran vuelto azules.

La suerte está echada, está echada de menos. Terminadas de llenar las casillas en la hoja de respuestas me pasan una hoja en blanco donde debo escribir las razones que me hacen un buen candidato.

Y nada, me falla la inspiración. Lleno la hoja de palabras bonitas y vacuas, grandilocuencias sin significado. Hablo del servicio público y de la patria y del ser un digno representante ante la comunidad internacional y como el periodismo me ha enseñado la importancia del diálogo y la apertura a otras culturas y yadda yadda yadda. Me doy sueño yo mismo, esto parece escritura automática, me digo que si lleno la hoja va a verse más falso todavía, así que amago en la mitad y termino con un juego de palabras moderadamente ingenioso.

Qué me pasa? Acaso no es esto lo que yo quiero? Por qué me cuesta tanto desear algo con toda el alma? Cuando me volví tan cínico?

La suerte está echada, está o no está? Siento que depende de la suerte, que fue una prueba demasiado específica y que muchos habrán salido despavoridos pensando que no tenían posibilidad. Y que tal vez tengan razón.

Yo pienso, qué pienso? pienso que sea cual sea el resultado me conformaré. Pienso que la Academia puede ser una respuesta facilona a mi vida, siendo que yo disfruto más las preguntas.
Pienso que no quiero y no puedo y me rehuso a pensar en el futuro, porque cada vez que pienso en el futuro me veo siempre solo, mirando hacia atrás, convertido en estatua de sal.

No me fue bien, pero pienso que a los demás les fue peor. Y que si no quedo entre los 50 veré con demasiado respeto a los que supieron responder correctamente el examen.

Pero no sé, no sé, no sé, no sé nada. Sé en qué año se firmó el tratado de Westfalia, pero no sé cuál diablos es el camino correcto que debería seguir, dónde ir, por qué ir. Necesito un tú para orientarme. Un tú que nunca he encontrado.

Quiero ser una buena persona, en verdad quisiera serlo, to better myself, "siempre deseé ser un apóstol", sabes?, y sin embargo siento que mis deseos están afónicos de soledad, quisiera que la suerte no jugase ningún rol en esto. Quisiera ser el héroe de tu fotonovela. Que las cosas me cuesten más y a la vez me cuesten menos, porque hay un tú que les da sentido. Quisiera que estuvieras aquí conmigo. Pero la tecla de la trompeta, la que suena Tú, no emite sonido alguno.

La suerte está echada, y yo me echaré a su lado, trataré de dormir una siesta, hoy ya no hay más quehacer y en verdad estoy cansado.

Corrompiendo a la juventud

La "moda lésbica", Así se llamó el capítulo de "El termómetro" en Chilevisión este jueves. Partiendo del caso de una chicas de un colegio de La Cisterna expulsadas por subir a su fotolog unas fotos donde se daban besos en la boca (aunque después el liceo anuló la medida).

Iván Núñez agregaba elementos al tema, que "The L word", que el beso Britney/Madonna/Christina, que Tatú. "El lesbianismo cunde entre las adolescentes como una moda que nos preocupa".

El debate nunca logró superar los puntos de vista opuestos de Iglesia y Modernidad. Una abogada defendía que las niñas no habían hecho nada malo, mientras una periodista opus decía que de tener un hijo homosexual lo querría, pero no le negaría que su vida sería "una desgracia". La vocalista de Saiko, Denisse Malebrán defendía el derecho a la experimentación y un cura anunciaba las penas del infierno para estas niñas por corruptoras de menores.

Y yo pensando que da exactamente lo mismo, que si todo el Villa María Academy se dedicase a hacer proselitismo lésbico con sus alumnas, eso no tendría ninguna incidencia negativa sobre sus vidas. Adquirirían una visión más amplia sobre su sexualidad, madurarían emocionalmente sin que sus hormonas las traicionasen con un embarazo adolescente y, honestamente, acaso a algún hombre le molesta saber que su mina está abierta a las posibilidad de tener sexo con otra mujer?

El lesbianismo existe, pero también es una fantasía masculina, y se me ocurre que si yo fuera el director del liceo de La Cisterna, tal vez me preocuparía eso, que estas niñas se estén exponiendo inocentemente a viejos depravados (neonazis, violadores). Hay que discutir el tema del riesgo que se corre al hacer públicas fotografías en la red. Pero que te expulsen por un beso es una medida ridícula.

Y dale el cura y la periodista alegando que la corrupción de la juventud y la lesera...por fotos de piquitos!!!! (se nota que nunca vieron Ranma 1/2)

Una representante del "Bloque lésbico" alegaba contra el trato de "moda" a una realidad social que sólo ahora se está dando a conocer. Y dale alegando contra el sistema, aunque luego ahí ya no le compré el discurso, porque es precisamente gracias al Sistema, y a la configuración de la comunidad lésbica como un mercado atractivo, que es posible que se desarrollen proyectos televisivos como "Queer as Folk" y "The L word", que estas chiquillas asistémicas no se pierden los domingos por Warner Channel.

Pensé que el tema había quedado ahí, y ya había desechado escribir un post sobre esto cuando llegó la Paula hoy por la mañana envuelta en una bolsa plástica junto con La Tercera.

11 galanes se visten de mujer para el especial de la revista "Nos gustan las mujeres".

No creo equivocarme si digo que esta si que es una descarada publicidad a la ambigüedad sexual y de paso al lesbianismo. Soy gay pero no soy ciego. Me imagino lo que pensaran todas las lolitas al ver a sus ídolos de la TV (aqui al lado tienen a Julián Elfenbein) vestidos de mujer y viendose regias regias. Yo soy gay, me gustan los hombres y sin embargo igual me anduve enamorando.

Es que miren esas pestañas, si de cara es igualita a Angel, la niña de las flores. Si parece actriz francesa!

Alvaro Espinoza, por ejemplo, como hombre está bien, pero como mujer está simplemente irrresistible. Andrés Velasco de hombre no me produce nada, pero de mujer, guachita. Y quien diría que Julio César Rodríguez luciría tan bien un par de pantymedias.

Alego que la revista Paula ha trastocado completamente mis códigos de preferencia sexual con esta producción fotográfica de la Alexandra Edwards. ("la", ja, como si la conociera)

Vaya, al menos hay excepciones. Ricardo Fernández y Gonzalo Egas tienen una belleza masculina que ya está muy bien, y con maquillaje no siento que ganen mucho. Habría que preguntarle ahora a un hétero qué opina, capaz sea al revés.

Dato freak: Ballero dijo que bueno a la sesión fotográfica, pero su foto al final no clasificó, porque los músculos no la hacían ver realmente femenina.

Pobrecita Ballerina, me la imagino con las polleras y las trenzas y el rubor y el rimmel y sin necesidad de ver la foto me conmuevo, me dan ganas de abrazarla y decirle que es linda igual, que no les haga caso a estas fotógrafas lesbianas que no gustan de su contextura física. Que de todo y para y todos hay en la viña del señor.

Y demando a la Paula por andar corrompiendo a gays decentes bien nacidos y con las cosas supuestamente claras.

Y este post está muy mal enfocado y yo ando falto de inspiración, Simón manda que lean a Luciano, la nueva tecla del Elqui. Tiembla Paulo Coelho!

Y si están con meningitis y no pueden salir a disfrutar el hermoso día, algunos consejos:

• Escuchar a Martha Wainwright, descargar de Soulseek "Who was I kidding?" y "Mother fucking asshole" (si, así se llama la canción)
• Leer y comentar con la familia la columna de Villouta en La Nación de este domingo 11. Aunque les cargue Villouta.
• Practicar el inglés leyendo esta excelente first date story
  
• Ir a ver Play, y quedarse dormido en la parte de diálogo sobre comer caca (qué clase de disgresión del guión fue esa??).
• Olvidarse de la meningitis y salir a disfrutar afuera, caminar tomando helado, sonreirle a los perros y guiñarle el ojo a los carabineros.
  

Pongo primera, pongo segunda

Al final no fui, no fui a hacer de patas negras, no me conecté al messenger a la hora convenida y en cambio me quedé en mi pieza viendo "Tape" de Richard Linklater.

Eso sí, no hay manera de convencer a un púber del valor del minimalismo, la atmósfera claustrofóbica, las ambigüedades y las vueltas de tuerca del guión. Mi hermano chico me odió (el quería ver un programa sobre la batalla de Waterloo en History Channel). De Linklater, honestamente....las he visto mejores.

No hizo falta ningún cura Opus para convencerme contra la lujuria, creo que fue el comentario de Manuel, diciéndome que quien no ha estado en una relación no puede despotricar contra ellas. Eso me picó.

Así que voy a hacerlo, voy a poner las manos en el manubrio y los pies en los pedales y voy a intentar hacer algo con mi vida. Voy a enfocar y disparar. Give monogamy a chance.

Lo primero, dejar de postergar cosas que sé tengo que hacer. Lo primero: ir a que me hagan un corte de pelo decente.

Me imagino que esto es como un programa de 12 pasos. El primero es aceptar que se tiene un problema, y lo acepto. Amigas, amigos, soy un perdedor, soy poco constante, no me planteo la existencia de un futuro en el que yo juegue alguna parte. Soy un vagohólico.

El segundo paso es conseguir un corte de pelo decente. Y lustrarme los zapatos. Y mandar mails solicitando pega.

Parece fácil así, siguiendo instrucciones podría llegar a cualquier parte, si a mí lo que me hace falta es el mapa.

Saber lo que quiero. Qué diablos quiero? Ah, claro, un pololo. Y un trabajo que me guste. Y un I-Pod nano. Y un Segway. Y una casa en el cerro San Luis.

No, no es cierto. Me conformo con un amorcito de primavera. Mínimamente correspondido.

Llego a la peluquería, me preguntan, usted con quien se atiende? les digo que es primera vez, que un amigo me dio el dato. Las mechas caen, no quiero mirar, pero miro, y no está mal esta vez, le pregunto el nombre al peluquero y me lo da en una tarjeta, me dice que los lunes está libre (?). Ahora cuando vuelva tengo que decir, me atiendo con Edward Scissorhands.

Lucky haircut. Llegué a casa, bajé Soulseek y pude terminar mi último CD recopilatorio de éxitos que escuché en Europa. Está de lujo. Franz Ferdinand, Timo Maas (feat Brian Molko), The Editors, The Bravery, Oasis, Kaiser Chiefs, Maximo Park, Hot Hot Heat, Ocean Colour Scene, Jamiroquai, Kasabian, Gorillaz, Bloc Party, White Stripes, The Futureheads, The Zutons, The Raveonettes, Babyshambles, Keane, Coldplay, Razorlight.

Y luego vi en el sitio web de The Cardigans el video de su nuevo single "I need some fine wine and you, you could be nicer". Y me gustó mucho.

Mandé un mail a mis amigos del colegio para hacer un malón y todos dijeron que bueno. Invité a mi amigo Rockstar a ver Play y me dijo que bueno. Mi madre cocinó pie de limón.

Nada como esos días en que todo marcha sobre ruedas y con buena música.

Pero ahora viene lo mejor.

Mandé un mail a Valdivia, para acreditarme como periodista del Festival de Cine. Lo hice casi como una humorada, pero me respondieron que ningún problema.

Así que ahora voy a Valdivia. Si entro a la Academia Diplomática al menos me habré despedido del periodismo en grande. A partir del 30 de septiembre les estaré contando de mis aventuras en el río Calle Calle.

Tengo que aprovechar esta racha, voy a buscar al mino más rico de gaydar y le voy a decir que salgamos a tomar algo.

El Patas Negras

Un blog sirve para muchas cosas, sirve para desahogarse, para sentirse menos solo, pero sospecho que no sirve para buscar consejo moral.

Al menos cada vez que he posteado algo buscando escandalizar a los lectores y despertar "ese cura Opus que hay en ti", no he tenido resultado. Será que los conservadores son menos que lo que pensamos?, será que no leen blogs?

Me llegó mail de Jeff, ya obtuvo su título en Cambridge y ahora continua su carrera (que a mi me parece tan bien trazada) en Washington D.C., trabajando en un Think Tank demócrata. Mi amigo Jeff viene de esa América sindicalista que resiste hoy y siempre a las corporaciones invasoras. Mi amigo Jeff me sigue conmoviendo, por él prometo pensármelo mejor antes de abjurar de los Estados Unidos. Mi amigo Ricardo me ha dicho que los gringos son el pueblo más voluntarioso que existe, que ellos sí que se esfuerzan por cambiar las cosas. Y que son tolerantes, hasta en desmedro propio.

Mi amigo Jeff me pregunta si dejé muchos pololos (boyfriends) en Europa.

Me encantaría decirle que sí, en cierto modo la respuesta es sí, me enorgullezco de haber conocido gente maravillosa, hombres a quienes considero amigos y que estaría feliz de volver a ver. El sexo casual puede crear un lazo, en especial si estás de gira internacional. Y tengo sus mails, y nos hemos escrito, con Walter de Berlín, Carlo de Siena y Robert de Budapest; con Ricardo de Barcelona; con Iain de Escocia y Johannes de Viena, chicos straight adorables; con Calvin de Paris, que nunca nos vimos y me dice que lo lamenta y me promete visita a Chile.

Boyfriends? En potencia, seguro.

pero no puedo, no puedo rebajar el término. Tengo una concepción tal vez demasiado idealizada de lo que significa un boyfriend, y por eso mismo creo que nunca he tenido uno. Y tengo 27 años, es un tema que me afecta.

Ok, Jeff. Dejémoslo en que sí, tuve un montón de pololos en Europa.

Tanto tiempo aplicando nociones heterosexuales de lo que es una relación a mi realidad gay. Tal vez debería aceptar que no es lo mismo, que la monogamia y el matrimonio son instituciones ajenas que no me corresponden ni me convienen.

Conozco pocas parejas gays, uno de los dos (llamémosle Y) se acaba de conectar al messenger y me manda un emoticón que me guiña un ojo.

Yo sé lo que eso significa.

Su pololo está hace dos meses en Medio Oriente, hace unas tres semanas Y me invitó a ver una película al departamento, a las once de la noche.

No hay doble discurso, yo tenía ganas de lo mismo, ver una película y dormir abrazados y claro, gastar calorías entre medio.

No es turbio, o quizás sí, pero más de lo que creen. Nos conocimos los 3 hace más de un año e hicimos un trío. X, Y, Z. Chicos guapos de buen nivel, departamento en El Golf, burgueses y dentro del closet, pero jóvenes, fuera del ambiente y un encanto de pareja. Desde entonces me siento algo así como el "amante acreditado extraoficial", y pienso que en ausencia de X mejor que Y esté conmigo antes que con otro que su pololo no conozca.

Y no lo sé. Vacío moral. No sé si está mal. No se siente mal. Se siente tierno. la experiencia del trío no la volvimos a repetir, al chico de Medio Oriente le pareció demasiado bizarra. Ahora creo que a mí también.

Me trato de poner en su lugar, si yo tuviera un pololo, tendría celos de él?

Pero es más fácil ser gay, es fácil pensar que tu pololo sí puede tener sexo si es con alguien a quien conoces, en quien confías y que no tiene intención en quitártelo porque le encanta la pareja que ustedes forman.

Lo único que sé es que no tengo argumentos para decirle que no a Y cuando me sugiere que veamos otra película este jueves.

No es mi amigo, no podría hacerle esto a un amigo, no podría hacer esto con un amigo. Nos juntamos sabiendo que lo que hacemos está mal, y esperando en algún momento sentirnos sucios y desagradados, pero todavía no nos ha sucedido. He's a boy, and I'm a boy, and we're both feeling lonely, and that's just it. Intuyo que la líbido terminará por acabarse y nos juntaremos sólo para no dormir solos. Pasaremos de boys a friends sin nunca mezclar las cosas.

Pongo a los boyfriends en la misma categoría que los unicornios.

Si algún día veo uno correré nuevamente detrás de él.

Por mientras soy un patas negras, presto a disfrutar del calor de una cama King Size junto a un morochito bien trabajado que no habla mucho pero tiene unos ojos que te dejan en claro que no hace falta. Sin remordimientos.

Y por la mañana bajaré en el ascensor, me despediré del conserje que siempre me trata muy bien, que dudo mucho sospeche algo, y caminaré por las callecitas de El Bosque, jurando que vi pasar uno por ahí, que lo vi esconderse en el antejardín de esa casa que está junto al Friday's, que en medio de las sombras alcancé a divisar el brillo de su cuerno solitario.

Villanos invitados

Desde que regresé de Europa comparto habitación con mi hermano de 12. Después de compartir pieza y lecho con tantos prójimos, no me ha molestado tanto el nuevo status quo, además es justo, mi pobre hermano menor llevaba 12 años en la misma pieza con mis padres, cosa que los tuvo a estos al borde de la separación (ahora que recuperaron privacidad parecen adolescentes), mientras hermano crecía más neurótico que Melvin Udall.

Quien no tiene privacidad ahora soy yo, pero al menos ostento poder de veto sobre lo que vemos en TV. Ayer le prometí una película buena y cumplí, vimos "The emperor's new clothes", sobre Napoleón, que escapa de Santa Helena con ayuda de un doble pero cuando llega a Francia ya nadie le compra que es él el emperador. Y es que ya nadie estaba para trotes imperialistas tras años y años de guerras tampoco, a Napoleón lo acoge una viuda guapa que sospecha que él está loco, pero se lo perdona considerando la escasez general de hombres disponibles.

Mi hermano y sus preguntas: Napoleón era bueno o malo?

Esa manía maniquea infantil. No tiene caso que le haya repetido mil veces que las personas nunca son 100% buenas o malas, que existen las motivaciones, las condicionantes del medio y la mala fama. Es más simple pensar en blanco y negro. Claro que lo es, y antes que empecemos a hablar de Hitler, Stalin y Pinochet, a quienes resulta más dificil humanizar, pero es necesario hacerlo, le digo que cierre el hocico y veamos la película.

El mal, el mal es un tema fascinante. Y ahora que estoy estudiando Historia de Chile (acabo de leer la que escribió Armado de Ramón, el difunto papá de la novia de la jueza Atala) resulta demasiado tentador analizarla desde la perspectiva de en qué momentos el diablo metió su cola y consecuencia de eso se fue todo a la cresta.

De hecho, encontré un villano. Un villano que parece malo que da gusto, que se merecería un artículo en la Historia de la Infamia del The Clinic. Si acaso ya apareció ahí, que alguien me diga en cual número.

El Villano se llama Emilio Körner. Esta es su mejor foto:


Qué es primero, el villano o el superhéroe?, cuál de los dos tiene el mejor disfraz? Cuál tiene la identidad más oculta?

Partiré por simplificar la cuestión, pintar el escenario con trazos ágiles. Estamos a fines del siglo XIX y Chile es una democracia consolidada, excepción absoluta a nivel regional, protopotencia. En una guerra con los vecinos del norte acabamos de conquistar el monopolio mundial del salitre, controlamos el Canal de Magallanes y somos los principales proveedores de la fiebre de oro en California. Se acaba de votar la separación de la Iglesia y el Estado, la Araucanía ha sido pacificada y el sur empieza a ser poblado por alemanes industriosos.

Al mando de la nación, José Manuel Balmaceda, quien tiene cojones y está dispuesto a dar los pasos necesarios para consolidar el futuro esplendor de nuestra república austral. Partiendo por nacionalizar el salitre que está en manos de empresas inglesas y alemanas.

Siempre me ha parecido que entre Balmaceda y Allende hay más coincidencias que esas famosas que se supone unen a Kennedy con Lincoln.

Pero no voy a hablar de Balmaceda. Y menos de Allende.

Se supone que nuestro país las tenía todas consigo en esos años. Y luego estalló la guerra civil, el presidente se suicidó, una oligarquía ociosa se apoderó de las instituciones y vendió el país al capital extranjero. La Belle Epoque chilena se despilfarró en París, y aún así sobró dinero para construir la Biblioteca Nacional y el Palacio de Bellas Artes, pero eso eran migajas de una riqueza que en serio, se derrochó en el casino de Montecarlo.

Quién fue Emilio Körner y por qué estoy dispuesto a culparlo de todo esto?

Emilo Körner era un militar prusiano, sin pitutos en la corte del Kaiser, había llegado a un punto de su carrera en donde le resultaba muy dificil ascender más, estaba estancado.

Chile venía de ganar una guerra, pero su ejército necesitaba modernizarse. Prusia era la nueva potencia europea después de derrotar a Francia en la guerra de 1870. Prusia la llevaba, y Chile contrató a Körner.

Körner llegó a Chile a criticarlo todo. El ejército chileno muy victorioso sería pero para Emilio daba lástima. Había que agrandarlo, instaurar un servicio militar obligatorio para todos los varones, comprar armas nuevas, uniformes nuevos, cascos en punta . Körner sabía lo que hacía, tenía un convenio con la empresa armamentista de la familia Krupp, y por cada venta él recibía una comisión. Krupp fue la gran beneficiada de la carrera armamentista de esos años, y una de las mayores promotoras de las dos guerras mundiales. Matthias Krupp fue juzgado en Nuremberg.

El caso es que Balmaceda quería subirle el impuesto a las empresas extranjeras que se beneficiaban del salitre chileno, empresas inglesas y alemanas que tenían fuertes lazos con la aristocracia terrateniente, algo de plata corrió por debajo y el Congreso se rebeló contra el Presidente. La marina, sobornada por los ingleses, apoyó al Congreso. El Ejército era fiel a Balmaceda, pero Körner hizo sus cálculos y se alzó con una facción rebelde.

Estalló la guerra civil, que la ganaron los malos, y Bang!, los sesos de José Manuel quedaron desparramados en un salón de la embajada argentina, donde había pedido asilo.

El traidor de Körner en cambio fue ascendido a coronel, logró sus planes, el estado de Chile encargó a Krupp una fortuna en uniformes, cañones y municiones. Tal vez hicieron canje con el salitre, que en el colegio nos dicen que era abono, pero lo cierto es que era más cotizado por ser materia prima para la pólvora. Körner regresó millonario a disfrutar de un acomodado retiro en Prusia. Königsberg?

Chile quedó con un ejército enorme y un país dividido, tarde ya para defender la Patagonia, que habíamos regalado a Argentina en tiempos de la Guerra del Pacífico. Chile quedó con un ejército reluciente y ocioso que los gobiernos oligárquicos se morían de ganas de poner a prueba, y eso hicieron, mandando a estrenar las nuevas armas y las nuevas técnicas de guerra, y los nuevos soldados curtidos en severísima instrucción nada menos que contra las asociaciones de obreros que empezaban ya sus primeras huelgas en el norte minero. De ahí la matanza de Santa María. Qué necesidad de escuchar a los huelguistas?, si servían de diana.

Las huellas del tremendo negocio que hizo Krupp en Chile se pueden rastrear por todo el siglo XX. El salitre chileno abona ahora los campos de Verdún y del Somme. Y yo en serio quería escribir de esto. Porque no encontré más literatura sobre el tema, sólo este artículo del historiador norteamericano William Sater, donde señala que en 1920 y pese a toda su modernización Chile tenía un ejército mastodóntico pero incompetente.


Era malo acaso Emilio Körner?

No, tal vez no era más que un industrioso alemán haciendo su trabajo de vendedor de armas de la mejor manera, para asegurarle el bienestar a su familia.

Y pienso que la señal del mal está marcada por el egoísmo, por nunca pensar en el bien común, por la ausencia de nobleza en el actuar, y no es un pensamiento que me de tranquilidad en tiempos como los que nos toca vivir, mis estimad@s.

Expiando culpas con íconos

Me siento fatal por dármelas de cínico y hacer chistes con Katrina en un post anterior. Me siento fatal por New Orleans que era una de las pocas ciudades que tenía ganas de conocer en USA.
Me consuela tal vez pensar que más fatal se habrá de sentir Bush que, pobrecito él, tuvo que reducir en 2 días sus 5 semanas de vacaciones estivales (que también las tiene en otoño, y primavera y en invierno, era que no). Idiota.
Y como me siento mal por eso y como fue recién el "Blogger's day" o algo así, he decidido regalarle a todos los que lean este post un datito de html para que amononen el suyo.

Ok, si quieren tener un ícono personal en la barra de dirección web (yo le llevo un Lápiz, fijáos), la cosa es muy fácil.
Se meten a Cambiar Valores > Plantilla, y entre las etiquetas head> y /head> insertan este comando, antecedido por una "<":

link rel="shortcut icon" http://www.xxxxxxxx.com/hjfhfjhf.gif">

es decir, se entiende que lo que está en rojo debe ser reemplazado por la dirección web (puede ser imageshack) del ícono que eligieron.
Es fácil encontrar íconos en google, lo importante es que ojalá sean de tamaño 10 x 10 pa' que se vean bien en el poco tamaño que ocupan.

Suerte a todos con eso. Y acepten mis disculpas