En el futuro, cuando piense en estos meses, el último trimestre del 2005 y los primeros meses del 2006 quedarán guardados en mi memoria como los "Días Gilmore".
Ver la serie de Warner sobre una joven madre (Lorelai) y su hija (Lorelai jr. o Rory), que también es su mejor amiga, vendría a ser la única rutina en que me reconozco. Ni siquiera el blog (la edad dorada de los blogs fue en 2004).
Podría hacer una línea de tiempo basada en mis adicciones a series de televisión, dejando fuera las series de dibujos animados infantiles. Muy cronológica demográfica targeteada.
The wonder years, Mac Gyver, Manimal, The A Team, Invasión extraterrestre ("V"), Small wonder, Family Ties, Papá de lejos ("Out of this world"), Alf, Saved by the bell, Growing pains, Beverly Hills 90210, Party of Five, Dawson's creek, Young Americans, The Nanny, Friends, Mad about you, Married with children, Felicity, Ellen, Ned & Stacey, Ally McBeal, The Simpsons, Seinfeld, 3rd rock from the sun, Will & Grace, Boston Public, Just shoot me, As if, Malcolm in the middle, That 70's show, Sex & the city, Queer as folk, Six feet Under, Scrubs, Lost, Desperate Housewives, Aquí no hay quien viva.
(Lista confeccionada con ayuda de
tv.com y
fotech.cl)
Casi que son como cursos de la Universidad. Algunas me dan ganas de ponerlas en un currículum. Ciertamente han tenido mucha más influencia en mi vida que Introducción a la
Computación, Gramática 2, o Deontología. University, what a bluff. Grandilocuencia, mediocridad y prestigio.
Esto no tiene que ver con estar desempleado. Conozco muchos trabajólicos que tampoco le ven mucho sentido a sus días y que para eso también acuden a la TV.
El caso es que mi rutina de lunes a viernes hace varios meses ya es esta. Me levanto a las 8:00 y vagabundeo frente a una pantalla de computador hasta que es mediodía y sintonizo el canal Warner para ver temporadas pasadas de
Gilmore girls. He visto todos los episodios y ya voy en la cuarta temporada. Me produce el efecto de sentir que mi vida tiene dirección.
Incluso pienso, los guionistas son gente inteligente. Son como los "maestros" de Brian Weiss. Al ver una serie uno se empapa de sus ideas y en definitiva, creo que es posible no sólo aprender cosas a través de las series de TV, sino incluso evolucionar como persona.
En serio, y además hay un misterio que resolver. Entre los capítulos actuales y los pasados hay una laguna que todavía no descifro.
En la última temporada Lorelai y Rory no se hablan, Rory ha dejado la universidad y vive con sus abuelos refinados y conservadores. Su objetivo de ser periodista corresponsal extranjero está en discusión. Y yo no sé a que se debe todo.
El caso de las chicas Gilmore es especial. Porque claro, son mujeres, es la serie más condenadamente femenina que existe, al lado de la cual Sex & the City es claramente un producto gay o transexual. Es la diferencia entre tener una guionista mujer y un guionista gay, por muy femeninamente sensible que este sea.
Acá no, esto es full estrógeno, y cada vez que veo Gilmore Girls me miro bajo el pantalón preocupado no vaya a ser que me termine afectando.
La serie está ambientada en un pueblito idílico de Connecticut (Stars Hollow) que sobrevivió a la modernidad, las autopistas y la suburbanización, y ahora es visto como atracción histórica. Donde todo el mundo se conoce y se chismea. Lorelai administra un Inn y vive con su hija desde que quedó embarazada en su último año de secundaria y abandonó la casa de sus padres en la ciudad vecina de Hartford. Éstos pertenecen a la alta sociedad de Nueva Inglaterra y nunca han tenido una muy buena relación con su única hija, rebelde, opinadora, inapropiada para el mundo de sangre azul y cenas de sociedad en que ellos viven.
La hija, Rory, es brillante, más madura que su madre en muchos sentidos. Y la serie comienza cuando Lorelai llega a un acuerdo con sus padres para que estos paguen la educación de su nieta en un colegio privado que le garantiza su admisión a Harvard, donde la niña quiere estudiar periodismo.
Qué me puede atraer de esta serie? Alguien me lo explica?
Por un lado me gusta como las protagonistas hablan, la comunicación perfecta que tienen, plagada de referencias culturales que luego tengo que ir a buscar en tv.com para entender. Uno sabe que es imposible hablar así de veloz e ingenioso en la vida real, lo cual es una bendición y una lástima.
Lo mismo deben decir algunos de los hábitos alimenticios de las protagonistas, que comen y comen y comen pero nunca pierden la línea.
Por otro lado, se puede hacer el análisis de contingencia. Lorelai y Rory representan al Estados Unidos de sus valores democráticos, progresistas y liberales, que ha sido arrojado fuera de casa y que se refugia en una "America" tradicional, de tarjeta Village. Stars Hollow es un arquetipo de los valores americanos tradicionales que nadie discute. Aquí no hay delincuencia, drogas, racismo, homosexualidad, malas palabras o jardines descuidados.
Es un pueblo donde todos participan de la asamblea vecinal y por ende del gobierno local, donde se va a misa y al cine indistintamente. Donde las minorías siempre son minorías.
Está la señora Kim, coreana muy estricta y conservadora, cuya hija rebelde, Laney, es la mejor amiga de Rory. Recién ahora en la mitad de la cuarta temporada Laney le dice a su madre que su sueño no es ser una ama de casa adventista, sino baterista de una banda de rock. La señora Kim le responde como buena coreana tradicionalista, "los hijos no mandan a los padres" y Laney se tiene que ir de casa.
Está Michel, el conserje del Inn. Que no es afroamericano porque es francés, y que tendría que ser gay, pero nadie se lo pregunta o hace chistes al respecto. Como es malaspulgas y habla con acento, esos ya son dos strikes, queda la sensación que un tercer strike no le está permitido.
Si, Gilmore girls tiene mucho que ver con "far from heaven", la película de Todd Haynes. Las corrientes progresistas son subterráneas y básicamente uno podría entender a Loreali como un ángel caído cuyo pecado fue ser fan de los Guns n' Roses en 1986. Eso y bueno, claro, quedar embarazada. Si, Lorelai es Lucifer. Seductora como él solo.
Se entiende entonces que es una serie subversiva en un nivel muy sutil, tal vez el más efectivo.
Porque la TV no es mera entretención, nones. En todo show hay una agenda política, bien que disfrazada.
Claro, es una serie de mujeres y los romances juegan un rol importantísimo. Lorelai tiene una relación muy particular con Luke (Scott Patterson), el propietario del Diner donde ellas pasan gran parte del tiempo. Otros intereses amorosos incluyen al padre de Rory (David Sutcliffe), el profesor de Rory (Scott Cohen) y mi favorito, Chris Eigeman, actor fetiche de las películas de
Whit Stillman.
Otros famosos que han salido de acá, Adam Brody (Seth en "The O.C.") fue novio de Lane. Y Jared Padalecki (que coprotagoniza "Supernatural") fue el primer novio de Rory.
Y tal vez tanto análisis es ridículo, no hace falta analizar tanto por qué me gusta esta serie, que al cabo no necesita mucha discusión admitir que es agradable sentirse identificado con Rory (Alexis Bledel creció guapísima, cosa de verla en "Sin City") y tener que decidir entre los dos galanes a continuación (Milo Ventimiglia y Matt Czuchry). Aparentemente Michel (Yanic Truesdale) ya hizo su elección, Rory, nos quedamos con el moreno pues.