Había una vez una erección

Después de ver "The grudge" no había caso que me durmiera. Además que hacía calor. Mañana elecciones presidenciales y legislativas, no hay fiestas este sábado, no hay venta de bebidas alcohólicas.

Que aburrido, las encuestas ya lo preveen todo. Habrá segunda vuelta. Aunque me agradaría que cambie el equilibrio político y el congreso logre una mayoría liberal.

En I-Sat dan una película de esas soft core porn típicas del cable. Una joven mulata regresa a la plantación de caña de azúcar que sus padres le heredaron al morir y donde ella vivió cuando niña. Está narrada en francés. Los personajes no hablan. Supongo que esto es porno dirigido por mujeres, no está mal. La mulata se llama Canelle (Canela) y es preciosa, tira en la playa con su amor de infancia, juguetea en el baño con su doncella y luego le tiene ganas al capataz, que es un negro de 40 con uno de esos culos tan ricos que tienen los negros. Canelle en todo caso es el eje erótico de la película, con vestidos cortos y sin sujetador, piernas largas, una mezcla de Halle Berry con Leonor Varela.

Me gustan las mulatas. Me gustan las negras. Y entiendo que haya gente que desconfíe de los bisexuales, pero David Bowie se merece todo mi respeto por cambiar a Iggy Pop por la modelo somalí Imán. Una vez bailé con una negra, es lo más cerca que he estado, y claro, me arrepiento de no haberme atrevido a más. Yo mismo me anulé como siempre lo hago al decirle que soy gay. Todavía no he conocido a ninguna mujer que me diga que eso es un mero detalle, que igual sigo en el mercado. Por eso tal vez es mejor no decir nada.

Pienso que Canelle me debería producir una erección, su cuerpo me parece atractivo, el vello de su pubis está bien recortado y me hace pensar que, en un caso ciertamente excepcional, su vagina puede que no tenga dientes.

Uf, mujeres. No le pidan a un hombre gay que haga un retrato hablado de sus vaginas. A mi me dan susto, me las imagino construidas por HR Giger, con muchos conductos lubricados y laberínticos en que perderse, el clítoris como un Jack-in-the-box. Sofía me trata de falocéntrico y seguro que tiene razón. El falo enhiesto a mi parecer es estético y ha inspirado monumentos humanos desde muy antiguo. La vagina en cambio es cavernaria, y como toda caverna, me la imagino cubierta de estalactitas y estalagmitas, o santa cachucha!, de murciélagos.

Tal vez se debe esto a que simplemente nunca he visto una vagina. Los colegios deberían contemplar la compra de revistas como Hustler para sus alumnos menos naturalmente inclinados a adquirirlas por su cuenta. Playboy educa mal. Hay que mostrarlo todo. Mis amigas lesbianas en general no tienen nada en contra del pene, tal vez porque saben a qué atenerse, no es un misterio, es un juguete.

No sé si tiene algo que ver con Bachelet presidenta, pero me siento por primera vez en la vida dispuesto a darle una oportunidad al sexo femenino. Lo mismo o similar a Goforit. Tal vez podríamos ir juntos a una casa de remoliendas, si todavía existieran. Si conociera a alguna ninfómana tal vez iría a verla y la provocaría con historias sobre mi nada despreciable dotación. Falocéntrico de nuevo, pero yo sé lo que tengo, y sé que alguna mujer me lo agradecería. Pero bueno, la erección sigue esquiva. Entrando a la caverna todo es frío y lúgubre. Dónde se prende una ampolleta aquí?

Almodóvar tiene que haber pensado lo mismo que yo cuando se le ocurrió la historia de "Hable con ella". Los hombres gays a las mujeres las adoramos, pero para pensar en la posibilidad de tener sexo con ellas ayuda imaginárnoslas en coma, aseadas, extraviadas. Única manera de desandar el camino y regresar al origen del mundo, la única manera de entrar al cuadro de Courbet.

Vagina viene de una palabra en latín que significa vaina. Una espada vuelve a su vaina cuando ya no hay más pelea. Vaina. El reposo del guerrero.

Concha es mejor, le añade un aspecto comestible afrodisíaco. Zorra, esa no la entiendo, tendrá que ver con el pelo que la cubre. No tiene caso, la lingüística te hace gay.

Me voy a internet un rato, los sitios amigos de siempre, que juegan a desafiar a chicos hétero a que experimenten con su sexualidad. Gringos que por plata y fama son capaces de cualquier cosa. Puede por otro lado, ser una legítima manera de protestar contra el gobierno de George Bush. "We love cock, out with Bush" parece ser el eslógan. Y la erección se constituye en su totalidad con vocales de mesa y apoderados de partido.

Tal vez para entrar a esa caverna lo que pasa es que no hay que entrar solo, podría invitar a algún amigo, así, los dos, cuidándonos las espaldas, me atrevería tal vez a llegar al fondo y tocar la campana de la existencia. Si, algún día si logro solucionar la ecuación de mi vida y llego a estar en una posición económica que me permita tener hijos voy a hacer eso, con mi novio o con algún chico guapo vamos a convencer a una mulata de que hagamos un trío. Uf, me lo imagino candente. Como tiene que ser. Entre los dos seguro que la mulata lo pasa bien, los labios de la mulata confirmando la falocracia, un falo guapo es un falo guapo y si es de un gay o no da igual mientras esté bien erguido, y luego a la caverna, probando diversas entradas, se oyen gemidos, pero me siento más confiado, entrelazamos las manos, haciendo cumbre en los senos de la mulata, que clase de fantasía racista bisexual es esta? La idea es que los tres lo pasemos bien. Que triste nacer de un accidente, de un descuido. Que gusto nacer de una fantasía erótica deliberada, una conjunción de cuerpos astrales. Mercurio, Venus y Marte.

I-Sat, la culpa la tiene I-Sat.